África: Jesuitas: Escalada bélica en el Congo. La ciudad de Goma tomada por los rebeldes

Desde ALBOAN seguimos con profunda preocupación e inquietud la escalada del conflicto que se vive en el Este del Congo, donde el principal grupo rebelde armado, el denominado M23, ha conseguido llegar y ocupar la ciudad de Goma, capital de la Provincia del Kivu Norte, expulsando, así, a las fuerzas armadas congoleñas que la defendían.

En esta ciudad, capital de la región, se encuentran las principales oficinas de coordinación del ingente trabajo de Acción Humanitaria que se desarrolla en toda la provincia. Una provincia que cuenta con más de 500.000 personas desplazadas internas, fruto de los enfrentamientos armados entre los múltiples y variado grupos armados que existen dispersos por la región.

Como consecuencia de esta nueva situación de inseguridad, la mayoría de estas organizaciones humanitarias han tenido que evacuar a su personal presente en la ciudad. Así ha sido el caso también del personal de Naciones Unidas, que ha debido trasladarse a zonas más seguras.

La situación que se vive actualmente es la más grave de los últimos años

La situación que se vive actualmente es la más grave de los últimos años, cuando en 2004 fuerzas rebeldes ocuparon tanto la ciudad de Goma como la de Bukavu, sembrando el caos y la violencia en los territorios circundantes. 

ALBOAN lleva años trabajando en la zona de la mano del Servicio Jesuita a Refugiados, ofreciendo servicios educativos a las personas desplazadas y refugiadas por la guerra, principales víctimas de este conflicto que prácticamente dura desde el genocidio de 1994 en Ruanda. En la actualidad, ALBOAN colabora con el Servicio Jesuita a Refugiados para mejorar las condiciones de vida de la población local, retornada y desplazada en el territorio de Masisi, a través de la educación formal e informal y a través de la atención a las personas más vulnerables. Mira el proyecto >

Estamos en contacto con los equipos en el terreno para poder seguir de primera mano la situación, pero sentimos la impotencia de no poder hacer nada para ayudar… más allá de informar y sensibilizar sobre este complejo conflicto en el que intervienen los intereses de diferentes actores, tanto de países extranjeros como de diversos colectivos congoleños. Todo ello con el trasfondo del control sobre la explotación de los recursos naturales en una zona de alta riqueza mineral.

Quizás sea esta riqueza mineral y los intereses creados por unos y por otros lo que haga que dichos actores y la Comunidad Internacional no sepan, o no quieran, detener esta sinrazón de violencia y sufrimiento que padecen los habitantes del Este de la República Democrática del Congo.

Campos de desplazados

Al visitar los campos de personas desplazadas nos impresionó el trabajo que lleva a cabo el Servicio Jesuita a Refugiados, una de las grandes organizaciones aliadas de ALBOAN, Ellos y ellas acompañan, defienden y sirven  a estas personas sin más futuro inmediato que sobrevivir el día a día a través de la ayuda humanitaria.

Educación en un contexto de conflicto (en euskera)

El trabajo en educación que ALBOAN viene apoyando hace años ha sido otro de los objetos informativos. Conversamos con los directores de diferentes proyectos educativos, que nos contaban las dificultades de trabajar en medio de un conflicto. Las clases se interrumpen, el alumnado se desplaza huyendo de la violencia y los edificios que albergan las clases son utilizados en muchas ocasiones como edificios militares. 

Explotación sexual

Tuvimos la ocasión de conversar con dos mujeres víctimas de violencia sexual y nos sobrecogió su testimonio y su capacidad de sufrimiento. Además el personal del JRS nos mostró una zona donde se asientan personas desplazadas “vulnerables entre las vulnerables”, donde el JRS trabaja con mucha constancia y calidad.

Recursos naturales

El conflicto del Congo es pretendidamente étnico pero en realidad  enmascara una lucha entre diversos actores nacionales e internacionales por el control y explotación de los ricos recursos naturales del país. Su coltán, el mineral con el que se fabrican la mayor parte de los aparatos electrónicos del mundo, es uno de los bienes más preciados, además de los diamantes y la casiterita.