Habla el orfebre e historiador del arte que lo hizo en 2005: «es un símbolo fuerte, un signo de este Pontificado»
REDACCIÓNROMA
El anillo del “Pescador” es uno de los «signos en desuso del papado que recuperó el Papa Benedicto XVI» y tiene «un fuerte contenido simbólico»; por este motivo espero que «no lo destruyan y creo que el colegio de expertos está evaluando justamente» esta posibilidad. Palabras de Claudio Franchi, maestro orfebre de la escuela romana e historiador del arte. Fue él quien en 2005 se encargó de crear el anillo del Papa.
Además, recuerda que «es uno de los símbolos, como tros, que fueron recuperados» por el Papa Ratzinger. Como ya no servía como sello, los Papas anteriores lo dejaron de usar, «creo que desde fines del siglo XIX», indicó el historiador del arte.
Así, este anillo representa «un signo de este Pontificado». Franchi recordó las «críticas instrumentales: se decía que era un Papa conservador y, en realidad, quiso recuperar un valor del pasado. Basta recordar, por ejemplo, que el anilo lo lleva en la mano con la que bendice». Por ello, el creador del anillo indicó que espera que no lo destruyan. Si, se habla de “destrucción”, pero el maestro artesano recordó que en realidad se alteraba el anillo grabando una “X” para que ya no fuera posible usarlo como sello.
«No porque sea el autor, sino por su fuerte carga simbólica», precisó Franchi, sería recomendable que acabara dentro de una teca, en algún museo o «en la oficina de las celebraciones del Pontífice». Esta obra de arte, «entre la búsqueda de los códices expresivos y la realización, requirió dos semanas de trabajo. Cuando ya lo había casi concluido, fueron presentados al Papa dos modelos y él escogió el más clásico».
El anillo representa a San Pedro, el pescador, la columnata y la Plaza, es decir «el espacio físico del pescador vicario. Por lo tanto, hay una relación entre San Pedro que pesca y Benedicto que pesca. Y la multitud de ayer lo representa muy bien».
Vatican Insider
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