Collins: «Haré que se escuche la voz de una mujer que sufrió abusos»

Entrevista con la señora irlandesa que Francisco nombró como miembro de la COmisión vaticana para la Tutela de los Menores

ANDREA TORNIELLICIUDAD DEL VATICANO

Es una de esas noticias que hasta hace algunos años habría sido clasificada como ciencia ficción. Pero ahora, gracias a la decisión de Francisco de proseguir con firmeza en la dirección que indicó Benedicto XVI, Marie Collins (una mujer irlandesa que sufrió los abusos de un sacerdote cuando tenía 13 años) acaba de ser nombrada miembro de la nueva Comisión anti-pederastia de la Santa Sede. Una mujer que cuando era adolescente fue víctima de violencia sexual estará involucrada plenamente para que las leyes y las normas existentes correspondan con un verdadero cambio de mentalidad en las jerarquías.

«Esperaba que hubiera un representante de las víctimas en la Comisión, pero no tenía idea de que me habrían nombrado –indicó Marie Collins a Vatican Insider–; para mí fue una sorpresa absoluta. La institución de esta Comisión es una decisión muy positiva por parte de Papa Francisco y puede llevar a un cambio real en la manera en la que el problema de la tutela de los menores y el cuidado pastoral de las víctimas sea afrontado en el futuro. Hay muchísimo trabajo por delante».

«Como sobreviviente a un abuso clerical, para mí ha sido un viaje muy difícil y largo. Mi confianza y mi respeto por la Iglesia católica disminuyeron notablemente por la forma en la que mi caso, y en general los casos de abuso, han sido afrontados. Hubo momentos en los que me preguntaba si debía irme. Por ello encontrarme ahora como parte de una comisión de este nivel en el Vaticano es algo que nunca habría podido prever. Y hay que aprovechar la ocasión para hacer que se escuche la voz de una víctima».

El anuncio llegó ayer sorpresivamente, después de una aceleración indicada personalmente por el Papa: la «Comisión para la Tutela de los Menores» en contra del fenómeno de la pederastia está, por el momento, compuesta por cuatro hombres y cuatro mujeres, representantes de diferentes países. Además de Collins y del cardenal Sean O’Malley, están la francesa Catherine Bonnet; la inglesa Sheila Hollins; el abogado italiano Claudio Papale; la ex-embajadora polaca ante la Santa Sede Hanna Suchocka; y dos jesuitas de la Gregoriana: el argentino Humberto Miguel Yáñez, director del Departamento de Teología moral y el alemán Hans Zollner, presidente del Instituto de Psicología.

Estos ocho miembros son solamente los primeros, porque con mucha probabilidad se añadirán otros para representar otras regiones del mundo. El nacimiento de la comisión antipederastia fue uno de los temas que discutieron en diciembre los cardenales consejeros de Francisco (O’Malley es justamente uno de ellos). Los nombramientos de ayer solamente representan un primer paso.

Vatican Insider