En su primer viaje a Croacia, el Papa insiste en que Occidente no debe relegar la fe y la moral al ámbito privado
4 Junio 11 - Madrid - M. Arribas
Benedicto XVI recibió ayer su primer baño de multitudes en Croacia durante la vigilia que se celebró en la plaza Josip Jelacic en el centro de Zagreb. A ella acudieron más de 50.000 jóvenes que no les importó aguantar las tormentas y fuertes lluvias que descargaron en la capital croata, y que recibieron al Santo Padre entre cánticos de «Benedicto, Benedicto», y ondearon banderas y bufandas con los colores amarillo y blanco del Vaticano.
En la ceremonia, que comenzó con la entrada en procesión de la Virgen de la Puerta de Piedra, la patrona de la ciudad, el Papa se dirigió a los jóvenes asegurándoles que Jesús «no es un embaucador», y exhortó a que no cedan a la tentación de las cosas materiales, «al tener y el poseer». Además, invitó a los muchachos a poner su confianza en Jesús, «ya que él nunca os desilusionará». «Jesús no es un maestro que embauca a sus discípulos: nos dice claramente que el camino con él requiere esfuerzo y sacrificio personal, pero vale la pena», añadió.
Con el sonido de los múltiples aplausos de la muchedumbre, Benedicto XVI animó a los jóvenes a no dejarse «desorientar» por las promesas atractivas de éxito fácil, de estilos de vida que privilegian la apariencia en detrimento de la interioridad». «No cedáis a la tentación de confiar únicamente en el tener, en las cosas materiales, renunciando a descubrir la verdad que va más allá, como una estrella en lo alto del cielo, donde Cristo quiere llevaros», recomendó el Obispo de Roma
Amén del encuentro con los jóvenes, en su primer día de estancia en la capital croata, el Papa defendió las raíces cristianas de Europa y la entrada de Croacia en la UE y pronunció un discurso en el Teatro Nacional ante un millar de personas, entre políticos, académicos, intelectuales, empresarios y líderes religiosos.
Búsqueda del bien común
«La religión no es una realidad separada de la sociedad, sino un componente suyo connatural, que constantemente pide que se escuche a Dios como condición para la búsqueda del bien común, la justicia y la reconciliación en la verdad», dijo el Papa, que destacó que si la conciencia, la religión y la moral se relegan al ámbito privado, como pretende «el pensamiento moderno más en boga», la crisis de Occidente «no tiene remedio y Europa seguirá perdiendo terreno». Sobre la conciencia, Benedicto XVI dijo que es fundamental para una sociedad libre y justa tanto en el plano nacional como supranacional y que pensaba en Europa, «donde hay que confirmar y desarrollar las grandes conquistas de la edad moderna, es decir el reconocimiento y la garantía de la libertad». Según Benedicto XVI, la calidad de vida social y civil y la calidad de la democracia dependen en parte de «se punto crítico» que es la conciencia.
Ya en el avión que le llevaba desde Roma, el Santo Padre defendió el ingreso de Croacia en la UE como «algo lógico, justo y necesario», aunque reconoció que se puede entender que sectores de esa sociedad se muestren escépticos debido a que Europa «se ha convertido en un centralismo demasiado fuerte».
El gesto «decisivo» del Vaticano
l El presidente croata, Ivo Josipovic agradeció ayer en persona al Papa el papel que jugó el Vaticano en 1991, como primer estado que reconoció su independecia, «gesto decisivo para la supervivencia de Croacia».
CLAVES
¿Por qué ha ido a Croacia?
1.- Entrada de Croacia en la UE
Benedicto XVI considera «lógica, justa y necesaria» la entrada del país balcánico en la comunidad europea a la que aportará su patrimonio espiritual y cultural.
2.- Bendición a las familias
El Papa bendecirá el encuentro anual de las familias católicas croatas, que se celebrará hoy por la tarde en el hipódromo de Zagreb.
3.- En camino a la JMJ
Ayer, el Papa invitó a los jóvenes de este país de los Balcanes a participar en la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid
La Razón
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