Se trata de seis italianos, dos hindúes, un croata y un argentino
REDACCIÓNROMA
Son seis italianos, dos hindúes, un argentino y un croato los diez nuevos sacerdotes de la diócesis de Roma que serán ordenados el próximo domingo por el Papa Francisco, durante la misa en la Basílica de San Pedro. Cuatro de ellos se formaron en el Pontificio Seminario Mayor, otros cuatro en el Colegio Redemptoris Mater y dos en el Seminario de la Virgen del Amor Divino. El más grande de todos tiene 44 años y el más joven, 26. Entre ellos hay un ex organizador de eventos, un ingeniero, un ex profesor y el hijo de un pastor anglicano convertido.
El “decano” del grupo es don Giuseppe Conforti, del Seminario Mayor, quien desde hace dos años presa sus servicios en la parroquia de San Policarpo. En una ocasión incluso acompañó al entonces cardenal Bergoglio al aeropuerto. Giuseppe Tavolacci tiene, en cambio, 36 años y colabora con la comunidad de San Corbiniano. Pierangelo Margiotta, de 37 años, será vicepárroco en Santo Tomás.
El argentino se llama Alberto Daniel López Pantano, de 40 años, y quien colabora desde hace dos años en Sant’Emerenziana, en la avenida Libia de Roma. Antes de tomar la decisión de seguir la llamada del Señor era ingeniero en Buenos Aires. Los dos diáconos del Divino Amor, son de la India: Sijo Kuttikkattil, de 26 años, y Gnana Prakash Marlapati, de 1973, hijo de un pastor ancglicano que se convirtió al catolicismo: «Era un gran predicador y con él se convirtió toda la aldea», indicó.
En cambio, desde Croacia llegó Iván Mladineo, de 28 años, para formarse en el Colegio Redemptoris Mater y que es vicario parroquial en los Santos Mártires de Uganda. La juventud de estos nuevos sacerdotes refuerza la importancia de las Jornadas Mundiales de la Juventud, como lo demuestra la vocación de Simone Giovannella, que asistió a la que se llevó a cabo en Toronto en 2002 y decidió seguir su camino con el movimiento Neocatecumenal. Fabio Vellucci pertenece a la misma comunidad y desempeñará su ministerio pastoral en San Ireneo (Centocelle): «Una realidad muy hermosa –indicó–, en la que puedo volver a descubrir cada día la alegría de ponerme al servico de las personas».
La vocación de Paolo Marinelli (de 38 años) también surgió durante una JMJ, la del año 2000 que se llevó a cabo en Tor Vergata: «Durante la vigilia en la explanada, el Beato Juan Pablo II dijo los que se sintieran llamados por el Señor debían aprovechar la ocasión, y fue así que decidí comenzar el recorrido vocacional». Antes de ingresar al Redemptoris Mater, Paolo trabajaba para una conocida multinacional del lujo, «pero después –explicó–, un pasaje de la Sagrada Escritura me conmovió profundamente: en el Libro de los Proverbios se lee que “la sabiduría es más preciosa que las perlas”. Y yo lo tomé a la letra».
Vatican Insider
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