"Saquen eso de inmediato", dijo Francisco a un cura
Está en contra del culto a la personalidad
El papa Francisco se ha molestado por la estatua con su imagen en tamaño natural que fue colocada en los jardines de la Catedral Metropolitana de Buenos Aires y ha pedido que la retiren.
La estatua, obra del escultor Fernando Pugliese, lleva expuesta menos de diez días en la Catedral que estuvo a cargo de Jorge Bergoglio como obispo de Buenos Aires y cardenal primado de Argentina hasta su elección como el sucesor de Benedicto XVI.
"Saquen eso de inmediato", le dijo Francisco a un sacerdote, según informa el diario 'Clarín'. Y su orden se cumplió velozmente y se retiró la estatua que se exhibía junto a una imagen de la Virgen de Luján, patrona de la Argentina.
La imagen de Bergoglio lo mostraba sonriendo, con su atuendo blanco e impartiendo su bendición. Francisco se molestó por la estatua a causa de su oposición al culto a los personalismos, según indicaron medios religiosos citados por el periódico.
El Arzobispado de Buenos Aires tenía previsto inaugurar el pasado 7 de julio un museo en la Catedral Metropolitana con objetos de Bergoglio de su época de sacerdote, obispo y cardenal. Pero la presentación del museo fue suspendida hasta nuevo aviso.
(RD/Agencias)
SIN ESTATUA EN BUENOS AIRES
Mientras en Italia Francisco es portada de Vanity Fair, en Buenos Aires fue retirada la estatua que había sido emplazada hace apenas diez días en el jardín del arzobispado porteño, junto a la imagen de la Virgen de Luján, en la Catedral.
El arzobispado porteño informó ayer que estaba previsto que estuviera expuesta en los jardines de la Curia el fin de semana del día del Pontífice. "La hemos trasladado al museo de la Catedral donde quedará definitivamente. El museo será abierto en las próximas semanas ya que nos encontramos terminando su infraestructura", indicaron voceros del arzobispado porteño ante la consulta de la nacion.
Sin embargo, ayer había trascendido que había sido el propio papa Francisco quien había pedido a las autoridades eclesiásticas porteñas que guardaran la imagen porque no acepta el culto a su figura.
Los turistas que pasearon ayer por Buenos Aires se sorprendieron al no encontrar la estatua papal, realizada por Fernando Pugliese, junto a la Virgen de Luján, en el jardín aledaño a la Catedral metropolitana.
"No sólo no estoy enojado, sino que cada día lo quiero más. Es un estadista", afirmó ayer a LA NACION Fernando Iglesias, al admitir que no había sido informado del retiro de la estatua de tamaño real, en resina epoxi y fibra de vidrio que había realizado especialmente.
"Me encantó su actitud; es el reflejo de su personalidad, aunque, tarde o temprano, quiera o no, va a estar la estatua expuesta porque ya hay estampitas, medallitas e imágenes del Papa dando vueltas por todo el mundo. Eso no lo va a poder parar", añadió.
De buen humor, el autor del parque temático Tierra Santa y de otras figuras como la Última Cena, que tras ser expuesta en el arzobispado fue enviada a una catedral de Croacia, consideró que la razón por la cual Francisco pudo haber pedido el retiro de su figura es porque "no tiene la conciencia clara de lo que él representa en la gente".
Más allá de este traspié, Iglesias se mostró entusiasmado con la confirmación de que en febrero próximo la imagen de la Virgen de Luján que está en el jardín del arzobispado porteño viajará al Vaticano para tener la bendición papal.
La Nación
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