Juan José Arrieta, consejero nombrado por el Papa: "Hay que emprender un camino de renovación y reconciliación"
El portavoz Clariond: "La petición de perdón nunca será suficiente y no puede borrar el mal sufrido"
(Jesús Bastante).- "Las víctimas son la prioridad. Los abusos no serán tolerados". El portavoz de la Legión, Benjamín Clariond, y el nuevo consejero general (uno de los dos, junto al padre Sabadell, nombrados directamente por Francisco), Juan José Arrieta, hablan en esta entrevista a RD del proceso de renovación en la Legión, donde es necesario "un cambio de mentalidad", unr"econocimiento explícito de los comportamientos gravísimos y objetivamente inmorales del P. Maciel" y un compromiso, que tal vez llegue tarde, con las víctimas. "La petición de perdón nunca será suficiente y no puede borrar el mal sufrido", afirman.
¿Cómo se valoran los pasos que se han dado hasta ahora y los avances en el capítulo general? ¿Qué se ha hecho y qué queda pendiente?
P. Benjamín Clariond: El Capítulo está siendo la experiencia de una responsabilidad ante la historia: culminar un examen de conciencia institucional y personal para confiar lo malo a la misericordia de Dios y para poder mirar al futuro con esperanzay cumplir el plan de Dios.
Hemos sido conscientes de que para dar más pasos en el camino de renovación auténtica y profunda que nos ha pedido la Iglesia, este capítulo no podía cerrarse en falso. Los hechos de estos años, que marcarán nuestra identidad, teníamos que "acogerlos, afrontarlos y transformarlos en eslabón para una nueva etapa de nuestra historia", como dice el comunicado del Capítulo.
Por lo tanto, un paso que hemos dado es ese volver a tomar conciencia y hacer muy presente nuestro pasado, nuestra necesidad, nuestra vulnerabilidad, nuestro pecado, nuestros errores, nuestras limitaciones y pequeñez... También conciencia de que la Iglesia viene en nuestra ayuda, nos pone frente a nuestra realidad, nos salva y nos ayuda a redescubrir, clarificar y definir con más precisión el don que Dios nos ha dado, y que la Iglesia reconoce.
De alguna manera hemos experimentado lo que el Papa Francisco dice en su mensaje para la cuaresma de este año: «El Evangelio es el verdadero antídoto contra la miseria espiritual: en cada ambiente el cristiano está llamado a llevar el anuncio liberador de que existe el perdón del mal cometido, que Dios es más grande que nuestro pecado y nos ama gratuitamente, siempre, y que estamos hechos para la comunión y para la vida eterna. ¡El Señor nos invita a anunciar con gozo este mensaje de misericordia y de esperanza!»
Ese examen de conciencia lo hemos compartido públicamente a través del mensaje en el que nos pronunciamos de forma conclusiva sobre el fundador, con una petición de perdón profunda y sincera a todas las víctimas, a todas aquellas personas afectadas por los hechos de estos años y por nuestras deficiencias. Naturalmente, sabemos que la petición de perdón nunca será suficiente y no puede borrar el mal sufrido, pero queremos tratar de aliviarlo y pedir también al Señor que Él haga lo que nosotros no podemos lograr.
Estamos intentando mejorar, queremos hacer las cosas bien, y hemos dado pasos. Por eso también hemos hecho balance de los avances concretos y objetivos en el camino de renovación. Hemos puesto el foco especialmente en los problemas que los visitadores detectaron y que la Santa Sede nos pidió abordar: el ejercicio de la autoridad y sus estructuras, el discernimiento y el proceso de formación de nuestros religiosos, y el carisma. Hemos recapitulado los principales avances que se han realizado en estos tres ámbitos, sabiendo que el Capítulo sigue profundizando en ellos. Digamos que esta es la segunda cosa que hemos hecho, y que también queda reflejada en el mensaje comunicado por el Capítulo.
Todo eso ha sido previo a los dos objetivos principales marcados por el Papa Benedicto XVI y después por Francisco: elaborar unas nuevas Constituciones y elegir un nuevo Gobierno General. En el borrador de las nuevas Constituciones que llegó al Capítulo hemos participado todos los legionarios durante los pasados 3 años. Lo hemos revisado y debatido punto por punto tanto en temas formales como en lo profundo. El 5 de febrero los padres capitulares terminaron la revisión del texto. Ahora se están atendiendo algunos detalles estilísticos y revisión de la coherencia interna del texto (algunos números se han cambiado de lugar, otros se han suprimido, otros se han añadido) y se presentará en breve a la aprobación del Capítulo para luego enviarlo al Papa.
También hemos configurado un nuevo gobierno, con la participación directa del Santo Padre en la formación del mismo. Desde diciembre el Papa indicó al Delegado Pontificio que el Capítulo elegiría al director general y al 2º y 3º consejeros, y que los cargos serían confirmados por la Santa Sede. También le indicó entonces que la Santa Sede nombraría al vicario general (que es el 1º consejero) y al 4º consejero. El Capítulo ha actuado con esas indicaciones.
Esta intervención del Papa es una señal que debería disipar las dudas de quienes no confían en que la Legión puede elegir un gobierno que continúe con las reformas emprendidas. El hecho de que haya confirmado todas las elecciones realizadas por el Capítulo es también elocuente.
Dedicaremos los demás días a debatir temas importantes para después indicarle al Gobierno las prioridades que ha de atender los próximos 6 años. Esto es lo que queda pendiente para las próximas semanas.
¿Algo que se pueda avanzar respecto de líneas clave para el futuro?
P. Benjamín Clariond: En la actitud, humildad para seguir el proceso de renovación, que aún no ha concluido. Y la renovación es algo que sólo es posible si cada uno y todos como institución descubrimos y reconocemos lo que tenemos que mejorar, y nos dejamos ayudar también a reconocer y apreciar los dones de los que tenemos que responder. Exige un cambio de mentalidad que ya ha empezado, pero que no se ha concluido, porque la conversión es un proceso que dura toda la vida.
No quitar el dedo del renglón en el proceso de reconciliación, la formación y discernimiento de los legionarios, y la simplificación de nuestras estructuras administrativas son tres líneas prioritarias que ya se ha pedido al Gobierno que aborde los próximos 6 años. Lo hemos explicitado así en el mensaje que hemos publicado.
Otra prioridad será la unidad en la misión y la coordinación con todas las demás vocaciones del Regnum Christi y también dentro de la Legión, para que todos trabajemos por construir la unidad en la diversidad, para que seamos verdaderamente una familia en la Iglesia en la que podamos experimentar a Dios y donde quien se acerque pueda encontrarse con el amor de Dios y que de ese encuentro Cristo las transforme en apóstoles y misioneros.
Es evidente que un campo prioritario es también continuar con nuestro compromiso por crear ambientes seguros para niños y jóvenes y la prevención de cualquier tipo de abuso, así como la atención a quien presente alguna denuncia contra un miembro de nuestra congregación. Esto incluye, naturalmente, la plena cooperación con las autoridades civiles y eclesiásticas. La carta del P. Sylvester Heereman del 5 de diciembre de 2013 es un punto de referencia también para el nuevo gobierno.
¿Cómo se han vivido las elecciones?
P. Benjamín Clariond: Yo no he estado presente en las elecciones, en las que sólo han estado los electores, el Delegado Pontificio y sus consejeros personales. Pero se percibía en los padres el sentido de responsabilidad por el momento histórico y, también, la importancia de que hubiera una clara determinación de continuar el proceso de renovación iniciado. También se ha vivido en un clima de oración para pedirle luz al Espíritu Santo. La intervención del Papa Francisco también ha dado mucha confianza para el futuro.
Desde mi punto de vista, como portavoz de la congregación, confieso que lo viví con cierto nerviosismo y expectación por la imposibilidad de compartir con nuestros hermanos y con quienes han seguido nuestra historia los resultados de la elección mientras no llegara la confirmación de la Santa Sede. Luego había rumores, especulaciones. Pero a pesar de todo, con gran paz y serenidad.
¿Cómo valoran la intervención del Papa Francisco? ¿Qué experiencia han tenido de su cercanía?
P. Benjamín Clariond: Es como un "a seguir trabajando, Pedro está con vosotros, adelante". Ya lo he mencionado de alguna manera. Lo vemos como una garantía, un apoyo al proceso para volver a la normalidad, y una expresión de confianza para que todos puedan confiar. El portavoz de la Santa Sede, el P. Federico Lombardi, se lo explicó así a una periodista que le preguntó al respecto hace unos días. Le dijo que la Santa Sede tenía previsto desde el principio nombrar a dos de los consejeros "para consolidar la confianza en el nuevo gobierno, incluso para aquellos que pudieran tener dudas acerca de los resultados de unas elecciones completamente autónomas" y que, por lo tanto, el gesto "debe leerse en un sentido positivo, y no como una corrección a los resultados de unas elecciones autónomas".
¿Cómo se va a concretar el compromiso con las víctimas?
P. Benjamín Clariond: La comisión de acercamiento que constituyó el Delegado Pontificio presentó al Capítulo su informe. Atendió cada uno de los 12 casos que se presentaron, ninguno ha quedado abierto, y la escucha y la ayuda material para cada caso ha contribuido, en lo humanamente posible, a aliviar las heridas y a fomentar la reconciliación. Hay también otras personas que no han querido acercarse a la Comisión de acercamiento, y, que se han acercado a legionarios individuales y se les ha ayudado de otras maneras. También hay personas que no han querido tener ningún tipo de trato con nosotros, y hemos respetado también esta decisión.
Sigue en pie lo que el P. Heereman decía en su carta del 5 de diciembre: «Aprovecho la ocasión para reiterar una vez más la invitación a quien hubiera sufrido un abuso por parte de un miembro de nuestra congregación, que considere la posibilidad de acercarse y abrir su experiencia. Queremos conocer los hechos, escuchar su historia, comprender su dolor, pedirle perdón por el sufrimiento causado y acompañarle en un camino de sanación.» Los contactos de los distintos países están en nuestro sitio de internet. http://www.legionariesofchrist.org/articulos/seccion.phtml?se=378
Somos conscientes de que las palabras han de sostenerse con hechos y secundarse con hechos continuadamente. Y una parte del compromiso con las víctimas es poner todos los medios para la prevención y llevar a sus últimas consecuencias cualquier denuncia que se presente.
Hemos definido una política estricta de actuación para prevenir los abusos, y para atender a las víctimas que se acerquen. La hicimos pública a comienzos de diciembre, está en nuestra web, como decía, para todo el que quiera conocerla y saber quién es la persona de referencia en cada territorio para contactarla. Es una política madurada a la luz de la experiencia de la Iglesia, de la congregación y de la sociedad civil. Y nuestro compromiso es cumplir con esa política y queremos llegar a ser, con toda la Iglesia, ejemplares en este campo. Las víctimas son la prioridad. Los abusos no serán tolerados y, si se presenta una denuncia, se investigará y se llevará a sus últimas consecuencias en colaboración con las autoridades civiles y eclesiásticas.
El P. Eduardo Robles Gil, el nuevo director general, formó parte de la comisión de acercamiento a las víctimas del P. Maciel. Decía en una entrevista que para él, como miembro de la comisión, fue muy doloroso y triste constatar las consecuencias de los abusos, y que casi siempre dejan herida para toda la vida. Durante el Capítulo los padres capitulares han rezado por las víctimas, porque sabemos que hay heridas que sólo Dios puede sanar. En su mensaje, el Capítulo ha pedido expresamente al nuevo Gobierno que mantenga el compromiso de seguir buscando la reconciliación.
Queremos hacerlo bien, somos conscientes de que siempre se puede mejorar, pero la seguridad de los niños y adolescentes es un principio no negociable.
¿Qué implicaciones y consecuencias tiene para la Legión de Cristo este "posicionamiento conclusivo" respecto del P. Maciel?
P. Benjamín Clariond: Este posicionamiento es un reconocimiento explícito de los comportamientos gravísimos y objetivamente inmorales del P. Maciel, que implica que no puede ser puesto como modelo, ni sus escritos personales como guía de vida espiritual. Confirmamos y reiteramos así lo que afirmamos en 2010.
Por otro lado, como decimos en el comunicado, la ayuda de la Santa Sede fue imprescindible para descubrir cómo la personalidad y el modo de actuar del P. Maciel estaban afectando a nuestra congregación. Esto ha significado un proceso de purificación de algunos aspectos de nuestra mentalidad y estructura. Una de las tareas principales en la revisión de las constituciones, y en nuestra vida práctica, hay sido la de distinguir y separar lo que realmente es patrimonio carismático de la congregación de aquello que no, de lo que es accidental, y revisar el ejercicio de autoridad y los procesos de formación y discernimiento para que sean acordes a lo que la Iglesia indica, como nos pidió la Santa Sede.
Otra consecuencia también es que vamos a tener que explicar muchas veces que sí hay un patrimonio carismático bueno a pesar de esto, pues una congregación religiosa y sus rasgos esenciales no tienen origen en la persona del fundador, aunque él haya sido instrumento para empezar esta obra; son un don de Dios que la Iglesia acoge y aprueba y que después vive en el instituto y en sus miembros. Hay mucho de misterio en esto y tenemos que discernir lo que Dios quiere decirnos a todos a través de fundaciones recientes y antiguas en las que hay un fundador que no ha estado a la altura del don que Dios transmitió a la Iglesia por su medio.
Padre Arrieta, ¿qué significa para usted el hecho de ser consejero nombrado por la Santa Sede?
P. Juan José Arrieta: El nombramiento me ha cogido por sorpresa. Lo acepto porque viene del Santo Padre y porque veo en él un gesto de confianza del Papa en la Legión. Venimos de una situación en la que necesitábamos ayuda externa, pero ahora la Iglesia confía en que nosotros podemos seguir adelante con las reformas que nos ha indicado, y ha nombrado a dos legionarios para ser consejeros. Podía haber nombrado a alguien externo, pero ha confiado en nosotros. Es también una transición a la normalidad, porque volveremos a depender, como cualquier instituto religioso, de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada que nos ayudará a vivir y desarrollar nuestro carisma para servir a la Iglesia y a todos los hombres y mujeres.
Es una grandísima responsabilidad y necesito oraciones. Pero quiero vivirla con el deseo sincero de apoyar al P. Eduardo para que sigamos recorriendo el camino que hemos emprendido por indicación del Papa y que hemos hecho propio. Un camino de renovación y de reconciliación, un camino de servicio a la evangelización.
Sólo uno de cada diez mexicanos cree la petición de perdón de los Legionarios de Cristo
El 60 por ciento piensa que el proceso de renovación de la congregación es irrelevante
El 66% pide la abolición del celibato, y más de la mitad que es la razón principal de los abusos
Sólo uno de cada diez mexicanosconsidera "muy auténtico" el arrepentimiento de los Legionarios de Cristo, según una encuesta publicada esta semana por elGabinete de Comunicación Estratégica. La misma subraya que apenas la mitad de los ciudadanos conocían los desmanes de su fundador, el pederasta Marcial Maciel.
En cuanto a cómo se considera el arrepentimiento de los Legionarios de Cristo, que dieron a conocer el jueves, en una reunión en Roma, sólo el 10.3 por ciento lo considera muy auténtico, 29.7 por ciento algo auténtico, 45 por ciento nada auténtico y 15 por ciento no contestó.
A la pregunta de si se cree que pedir perdón a quienes fueron abusados sexualmente por el padre Marcial Maciel y otros sacerdotes es un buen paso de los Legionarios de Cristo al asumir estos abusos o resulta irrelevante que pidan perdón a las víctimas, 31.4 por ciento considera que es un buen paso, 59.8 por ciento dice es irrelevante y 8.8 por ciento no contestó.
En cuanto a si se cree que con los cambios que están realizando los Legionarios de Cristo los abusos a menores van a disminuir, van a seguir igual o a van aumentar, el 34.7 por ciento señala que van a disminuir, el 42.2 por ciento que van a seguir igual, 13.2 por ciento van a aumentar y 9.9 por ciento no contestó.
Sobre el tema del celibato, si se cree que la Iglesia Católica debería eliminar el celibato obligatorio para los sacerdotes, el 66.2 por ciento respondió que sí, 24.1 por ciento dijo que no y 9.7 por ciento no contestó.
Si se cree que el celibato impuesto a los sacerdotes es la razón principal por la que existen abusos sexuales al interior de la Iglesia Católica, el 52.6 por ciento dijo que sí, 39 por ciento señaló que no y 8.4 por ciento no contestó.
Y en acciones contra el abuso sexual, ¿Qué tendría que hacer la Iglesia Católica para evitar más casos de abuso sexual por parte de sacerdotes a menores de edad?, el 36 por ciento señaló que entregarlos a la justicia, 20.6 por ciento castigarlos con cárcel, 13.1 por ciento obligarlos a renunciar a la vida eclesiástica, 12.6 por ciento encerrarlos a una vida de oración para que nunca estén cerca de menores de edad, 7.3 por ciento castigarlos con la pena de muerte, 0.8 por ciento obligarlos a hacer trabajo comunitario, 0.7 por ciento obligarlos a reparar el daño económicamente, 0.4 por ciento castigarlos físicamente, 6.7 por ciento otro y 1.8 no contestó.
(RD/Agencias)
No comments:
Post a Comment