Primer día del encuentro del P. General de la Compañía de Jesús con la Provincia Ecuatoriana
Es la primera vez que el P. Adolfo Nicolás, S.J., Superior General de la Compañía de Jesús visita Ecuador. Durante su primera Jornada en Quito, realizó importantes encuentros protocolarios y conoció de cerca la comunidad jesuita del Ecuador y el trabajo apostólico que realizan en Quito y Riobamba.
Al inicio de una atareada jornada, el Padre General, junto al Padre Provincial, Gilberto Freire, S.J. y al P. Francisco Echeverría, Secretario Provincial, tuvo una reunión privada con el Señor Nuncio Apostólico.
Después, en el colegio San Gabriel, luego de una breve visita a la prodigiosa imagen de la Virgen Dolorosa del Colegio, se llevó a cabo el encuentro con los jesuitas de Quito y Riobamba. El P. Provincial y los delegados de los cinco sectores apostólicos expusieron el estado actual de sus obras y los desafíos a los que se enfrentan. El Padre General, a su vez, enfatizó la necesidad de evaluar serenamente el trabajo que realiza cada jesuita y comunidad, perdiendo el temor a reconocer los fracasos, pues, sin fracasos no se aprende y no se mejora ningún apostolado. En un clima familiar, pues, estaba en un contexto predominantemente jesuita, compartió su experiencia del encuentro con el Papa Francisco que, según su apreciación, es un Pontífice que habla el lenguaje del pueblo, sobre todo en base a símbolos actitudinales.
Luego, pasamos a celebrar la Eucaristía. Con mucha sencillez, pero con profunda vivencia espiritual participó en esta celebración un nutrido grupo de jesuitas y colaboradores laicos, entre los cuales apreciamos la participación del grupo que animó musicalmente esta eucaristía. Ya que la celebración se dio en presencia de la imagen de la Virgen Dolorosa del Colegio, el Padre General recalcó la importancia de compartir con la gente la experiencia del dolor, de las dificultades, pues, dijo: celebramos muy a gusto los éxitos, pero no apreciamos el valor de los fracasos (cuando estos no dependen de nuestra desidia, obviamente), pues, un jesuita no puede hablar de Dios sin conocer el sufrimiento humano.
Por la tarde, luego de un fraterno compartir de la mesa, el P. Adolfo fue a conocer la renombrada Iglesia de la Compañía que está a cargo de la comunidad Residencia San Ignacio y, a continuación, sobrevino una extensa sesión de la Consulta de Provincia y la Comisión de Ministerios.
La jornada concluyó hacia las 20:30 de la noche, con una cena compartida con el Señor Arzobispo de Quito, Mos. Fausto Trávez, y sus obispos auxiliares.
“Todos somos colaboradores, no de los jesuitas, sino de la obra de Dios”
Adolfo Nicolás, S.J.
Quito, 18 de Agosto 2013
En su segundo día de encuentro con los jesuitas del Ecuador, el P. Adolfo Nicolás, S.J., Superior General de la Compañía de Jesús, mantuvo una entrevista con la prensa, y, sobre todo mantuvo un extenso encuentro con los colaboradores y colaboradoras de las obras apostólicas de Quito y Riobamba, junto a familiares, amigos y bienhechores de las obras de la Compañía. Su última jornada en Quito la cerró con una cálida visita al noviciado y a la enfermería, dos obras que se encuentran juntas al norte de la ciudad.
La rueda de prensa se efectuó con la presencia de dos medios de comunicación: “El Comercio”, importante periódico nacional, y “Tv Noticias PUCE”, noticiero institucional de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. El diálogo versó sobre la estrecha amistad que tiene la Curia General con el Vaticano y, particularmente, con el Papa Francisco, y sobre la importancia de asumir los retos del mundo moderno desde la fe y la esperanza cristianas.
Inmediatamente después, cumplió con uno de los momentos más esperados de la jornada, el Encuentro con colaboradores, familiares de los jesuitas, amigos y bienhechores de las obras de Quito, Riobamba - Guamote, efectuado en el Centro Cultural de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. En su alocución y diálogo con las delegaciones de dichas obras –que, por cierto fueron muy numerosas-, Adolfo Nicolás, S.J., enfatizó sobre la vital importancia de la colaboración entre seglares y jesuitas, no en una u otra obra de la Compañía de Jesús, sino en la “misión de Dios”.
En el campus de la PUCE, también visitó la comunidad San Pedro Canisio, donde residen algunos jesuitas que comparten el trabajo universitario. A continuación, presidió una celebración eucarística en compañía de los sacerdotes jesuitas y otros sacerdotes amigos. Terminada la eucaristía, los grupos artístico-culturales de la PUCE le brindaron una presentación de variadas piezas musicales y danza, y el encuentro terminó con un delicioso almuerzo típico, en el cual, seguramente, saboreó por primera vez algún bocado...
Entrando la tarde, se trasladó al norte de Quito, donde quiso visitar a la comunidad del noviciado San Ignacio y la enfermería Maurilo Detroux, actividad con la cual concluyó esta última jornada en Quito, la cual ha sido inmensamente rica en sabiduría para jesuitas y colaboradores del sector norte de la Provincia.
Presentaciones artísticas de estudiantes de la Pontificia Universidad Católica de Ecuador
Entrega de Virgen alada de Legarda
Almuerzo de jesuitas y colaboradores
Recorridopor la Unidad Educativa Javier
Con Jesuitas, colaboradores y amigos
Con Monseñor Antonio Arregui, Arzobispo de Guayaquil
Jesuitas Ecuador
Con Monseñor Antonio Arregui, Arzobispo de Guayaquil
Jesuitas Ecuador
Un visitante bienvenido
Por vez primera llega al Ecuador el P. Adolfo Nicolás, Superior General de los jesuitas desde enero del 2008. Nacido en España, ha pasado la mayor parte de su vida en el Japón. Intelectual destacado y gobernante efectivo, está aportando a la Compañía nuevas visiones, otros modos de acercarnos a Jesús en nuestra vida y tareas.
Para su elección contó mucho el que los jesuitas viésemos en él tener asimilada la cultura del oriente, lograda desde la vida junto a los pobres, con los que convivió siempre, y la enseñanza en la prestigiosa Universidad Sofía de Tokio. No es un Pedro Arrupe bis .Son personalidades diferentes. Hay que ver a Adolfo Nicolás expresarse, leer sus escritos, convivir con él…para valorarla novedad. Ve con el corazón. Repite a donde va: “Busquemos respuestas de hoy para los problemas actuales”.
Coincide ahoracon el Obispo de Roma,el jesuita Francisco. El Papa dijo a los jesuitas el día de San Ignacio, qué espera de nosotros: “Quisiera proponerles tres pensamientos sencillos guiados por tres expresiones: Poner al centro a Cristo y la Iglesia. Dejarse conquistar por él para servir. Sentir la vergüenza de nuestros límites y pecados para ser humildes delante de él y de los hermanos”. “El punto fundamental es común: dejarse conquistar por Jesús. Yo busco a Jesús, yo sirvo a Jesús porque él me busca primero, porque he sido conquistado por él. Y esto es el corazón de nuestra experiencia porque él es primero siempre. En español hay una palabra que es muy gráfica y que lo explica bien: El nos “primerea”. El es primero siempre. Cuando nosotros llegamos, él ya ha llegado y nos espera”.
Y el Superior General viene a eso: a alentar a los jesuitas de Ecuador y a cuantos colaboradores, amigos y alumnos, están en su área de influencia para que nos miremos con ojos nuevos. Desea hacer reverdecer con vigor obras y pastorales valiosas, necesarias. Universidades y Colegios con ideales que renueven a nuestra sociedad. Hay que dejar con paz lo que ya está atendido o superado; ir a las fronteras de la juventud y donde se genera una sociedad solidaria y justa.
Dicho con palabras nuestras: se pide a la Compañía del Ecuador una evangelización creativa joven, sonreída, alegre. Tan atractiva que cautive atodos. Identificada con la Iglesia ecuatoriana, una iglesia para los pobres, buscará a los que no acuden a ella y nada esperan de Jesús. Pero “Jesús es programa y propuesta, verbo y no sustantivo”.
El Papa dijo en Río a sus compatriotas: “¿Qué espero después de estas jornadas? Espero “lío”, que la Iglesia salga a las calles. Las parroquias, los colegios, las instituciones son para salir; si no salen se convierten en una ONG, y la Iglesia no puede ser una ONG”. Es Jesús en acción.
Sea bienvenido, P. Nicolás. Su presencia genera esperanza.
Para su elección contó mucho el que los jesuitas viésemos en él tener asimilada la cultura del oriente, lograda desde la vida junto a los pobres, con los que convivió siempre, y la enseñanza en la prestigiosa Universidad Sofía de Tokio. No es un Pedro Arrupe bis .Son personalidades diferentes. Hay que ver a Adolfo Nicolás expresarse, leer sus escritos, convivir con él…para valorarla novedad. Ve con el corazón. Repite a donde va: “Busquemos respuestas de hoy para los problemas actuales”.
Coincide ahoracon el Obispo de Roma,el jesuita Francisco. El Papa dijo a los jesuitas el día de San Ignacio, qué espera de nosotros: “Quisiera proponerles tres pensamientos sencillos guiados por tres expresiones: Poner al centro a Cristo y la Iglesia. Dejarse conquistar por él para servir. Sentir la vergüenza de nuestros límites y pecados para ser humildes delante de él y de los hermanos”. “El punto fundamental es común: dejarse conquistar por Jesús. Yo busco a Jesús, yo sirvo a Jesús porque él me busca primero, porque he sido conquistado por él. Y esto es el corazón de nuestra experiencia porque él es primero siempre. En español hay una palabra que es muy gráfica y que lo explica bien: El nos “primerea”. El es primero siempre. Cuando nosotros llegamos, él ya ha llegado y nos espera”.
Y el Superior General viene a eso: a alentar a los jesuitas de Ecuador y a cuantos colaboradores, amigos y alumnos, están en su área de influencia para que nos miremos con ojos nuevos. Desea hacer reverdecer con vigor obras y pastorales valiosas, necesarias. Universidades y Colegios con ideales que renueven a nuestra sociedad. Hay que dejar con paz lo que ya está atendido o superado; ir a las fronteras de la juventud y donde se genera una sociedad solidaria y justa.
Dicho con palabras nuestras: se pide a la Compañía del Ecuador una evangelización creativa joven, sonreída, alegre. Tan atractiva que cautive atodos. Identificada con la Iglesia ecuatoriana, una iglesia para los pobres, buscará a los que no acuden a ella y nada esperan de Jesús. Pero “Jesús es programa y propuesta, verbo y no sustantivo”.
El Papa dijo en Río a sus compatriotas: “¿Qué espero después de estas jornadas? Espero “lío”, que la Iglesia salga a las calles. Las parroquias, los colegios, las instituciones son para salir; si no salen se convierten en una ONG, y la Iglesia no puede ser una ONG”. Es Jesús en acción.
Sea bienvenido, P. Nicolás. Su presencia genera esperanza.
Federico María Sanfelíu
Hoy, Quito
Hoy, Quito
Líder mundial jesuita, de visita
Adolfo Nicolás SJ, superior general de La Compañía de Jesús, elegido en el 2008, visita Ecuador desde el viernes hasta mañana y realiza encuentros con jesuitas en Quito y Guayaquil.
Ayer, en el auditorio del Centro Cultural de la Pontificia Universidad Católica (PUCE), el sacerdote tomó la palabra ante unos 300 católicos, en su mayoría laicos.
Jesuitas de Pichincha y Chimborazo hicieron un recuento de las obras que realiza esta congregación, entre ellas nombraron los institutos de educación de Fe y Alegría, el trabajo con comunas indígenas de Guamote y el manejo de la radio La Voz de Guamote.
El clérigo destacó la importancia del servicio religioso para los más necesitados, que debe hacerse con entrega, humildad y verdadera solidaridad. “Los laicos son la verdadera fuerza de nuestro apostolado”, dijo al resaltar el trabajo que ellos realizan. Además hizo bromas sobre lo que se considera es el papel de los laicos en la Iglesia y explicó que hay un cambio de visión en el sentido de que todo trabajo busca concretar la misión de Dios: buscar el bien de la humanidad.
El clérigo, de nacionalidad española, es desde el 2004 responsable de toda la región jesuita del Asia Meridional, que abarca Myanmar, Timor Oriental e incluso la provincia de China y Vietnam. Se ha relacionado con migrantes filipinos y de toda Asia. Hoy se prevé que esté en Guayaquil.
El Universo, Guayaquil El P. General de la Compañía de Jesús en ecuador
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