Entrevista a Judith Muñoz Saavedra
“Han aumentado los femicidios y la violencia sexual hacia las mujeres; hay persecución política, detenciones ilegales y hostigamiento; hay más asesinatos, secuestros y amenazas", explica Judith Muñoz Saavedra, cooperante.
El 28 de junio de 2009, Honduras sufrió un golpe de estado político militar. El presidente electo democráticamente, Mel Zelaya, fue expulsado del país por el ejército, instalándose un gobierno de facto que recortó las libertades constitucionales, censuró a los medios de comunicación y amparó la persecución de activistas hondureños opuestos al golpe. Un año después, tras unas elecciones presidenciales de postín cuyos resultados no fueron reconocidos ni por la resistencia hondureña ni por gran parte de la comunidad internacional, el nuevo gobierno trata de vender una imagen de normalidad democrática. Sin embargo, la represión no ha cesado y siguen siendo asesinados periodistas, sindicalistas y campesinos opuestos al golpe.Hemos hablado con Judith Muñoz Saavedra, cooperante que vivió en Honduras los meses posteriores al golpe de estado, para conocer la situación que atraviesa el país y la resistencia popular.
¿Honduras vive en una dictadura desde el golpe de estado?
Honduras vive la herencia de un golpe de estado perfecto. El presidente depuesto está en el exilio. Ninguno de los responsables del golpe ha sido sancionado, al contrario; el presidente de facto hasta las elecciones, Roberto Micheletti, fue nombrado diputado vitalicio y el ex general Romeo Vásquez, que lideró el golpe militar, gerente de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones. Para legitimarse, los propios golpistas organizaron unas elecciones presidenciales en noviembre en un clima de censura y represión. El gobierno que surgió de esas elecciones no ha investigado ni sancionado los crímenes cometidos en la etapa de Micheletti. En este momento las violaciones de los derechos humanos y la persecución política continúan.
¿Cuáles son las principales violaciones a los derechos humanos que se dan en estos momentos en el país?
En los últimos meses han muerto 9 periodistas y se ha producido una cadena de asesinatos selectivos de miembros de la resistencia. Han aumentado los femicidios y la violencia sexual hacia las mujeres. Hay persecución política, detenciones ilegales y hostigamiento: se han destituido funcionarios, maestros y maestras y jueces y juezas que rechazaron el golpe. Ha recrudecido la violencia: hay más asesinatos, secuestros y amenazas. Policías y militares han cerrado radios comunitarias y han desalojado a campesinos y campesinas de sus tierras. La censura y el clima de temor continúan.
>> Y a pesar de ello, parece que es sólo cuestión de tiempo que la comunidad internacional readmita a Honduras en sus organismos…
Las elecciones se desarrollaron en un clima de censura y represión, no hubo observadores internacionales independientes y los resultados tardaron horas en aparecer, por un supuesto fallo técnico. Yo vi cómo las calles y los centros de votación estaban totalmente controlados por el ejército. La gente me comentaba que les retenían el carnet de identidad para obligarlos a ir a votar, otros me decían que acudían a votar por miedo a posibles represalias de grupos armados. Aun así, hubo una altísima abstención, que se apreciaba al recorrer los recintos electorales. Al legitimar este simulacro de elecciones, EEUU y el resto de países le han hecho un enorme daño a la credibilidad, del pueblo hondureño, al sistema democrático y a las instituciones del estado.
,>> ¿Qué opinión te merece la posición del gobierno español al respecto?
Ha tenido un papel ambiguo y contradictorio. Al principio condenó con firmeza el golpe, incluso el presidente de facto Micheletti tomó represalias y exigió a la embajada española que entregara sus credenciales diplomáticas. Pero luego de las elecciones, la postura del gobierno español se fue suavizando hasta llegar a invitar al actual presidente hondureño, Porfirio Lobo, a la cumbre de la Unión Europea con Latinoamérica. Paradójicamente el repudio del golpe fue disminuyendo en la misma medida que aumentaron las negociaciones para la firma del Tratado de Libre Comercio entre ambas regiones.
>> ¿Tanto petróleo tiene Honduras?
No solo petróleo, Honduras ofrece un paraíso de materias primas y el puerto de aguas profundas más grande y mejor equipado de Centroamérica. Tampoco se ha de olvidar la industria maquilera y la ubicación geopolítica estratégica del país. Estados Unidos acaba de inaugurar una nueva base militar en la región de la Mosquitia, que se suma a la de Palmerola, donde existe una de las mejores pistas de aterrizaje de todo Centroamérica.
>> ¿Qué colectivos forman parte de la resistencia, agrupada en el Frente Nacional de Resistencia Popular?
El Frente es muy amplio, en él confluye una gran diversidad de colectivos sociales: maestras, sindicalistas, indígenas, campesinos, estudiantes, profesionales, artistas, intelectuales, el colectivo Lésbico Gay Transexual Bisexual Intersexual (LGTBI), bases de los partidos políticos tradicionales y comunidades de las iglesias católicas y evangélicas. Lo que más me impresionó es la gran cantidad de mujeres: representan casi el 70 % de la resistencia. El movimiento feminista y las organizaciones de mujeres han sido uno de los pilares de la resistencia y han participado activamente en el Frente, desde su origen.
>> ¿Cuál es su principal objetivo a corto plazo?
El Frente está recolectando firmas para exigir la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente. Esperan reunir un millón 200 mil adhesiones - un tercio del padrón electoral - antes del 15 de septiembre. El objetivo, a largo plazo, es generar un proceso participativo para la refundación de Honduras. También apoyan la constitución de la Comisión de Verdad promovida por la Plataforma de Derechos Humanos de Honduras.
>> Por parte de las ONG españolas parece que ha habido bastante silencio tras el golpe…
Al principio hubo declaraciones colectivas de condena, pero luego el tema pasó al olvido. En los últimos meses la represión se ha agudizado y pienso que es urgente que las coordinadoras de ONG, a nivel nacional y autonómico, se posicionen y denuncien las violaciones de los derechos humanos. Lamentablemente muy pocas entidades han asumido un rol activo de incidencia política. Sin embargo, estas pocas ONGD han tenido un rol importante y están contribuyendo a romper el silencio oficial y mediático que se ha impuesto tras las elecciones.
>> ¿Qué tipo de apoyo podrían dar ahora?
Creo que las coordinadoras de ONGD deberían apoyar la Comisión de la Verdad de la plataforma de derechos humanos. Las entidades pueden difundir, sensibilizar y explicar las causas del golpe de estado. También es importante apoyar las contrapartes y organizaciones sociales que están en peligro. Es necesario hacer incidencia sobre el Estado español y la UE para que reconozcan al Frente de Resistencia y para que no normalicen las relaciones diplomáticas con el país, en las actuales circunstancias. Creo que es una oportunidad para la solidaridad, para establecer nuevas alianzas y para aprender del proceso político y organizativo del pueblo Hondureño.
canalsolidario.org
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