Miles de ugandeses están en riesgo por sequía y falta de alimentos debido al fenómeno meteorológico conocido con el nombre de La Niña.
El Ministro de Preparación para Desastres, Musa Ecweru, ha alertado de que la situación requiere soluciones urgentes, puesto que se espera que las precipitaciones de este mes de marzo no sean suficientes para apoyar a los cultivos de algunas zonas del país.
La más afectada será el área septentrional, donde se encuentra la región semiárida de Karamoja. Los ugandeses de las zonas afectadas ya han tenido que empezar a desplazarse para conseguir agua, aunque los fuertes vientos y las altas temperaturas dificultan su movimiento.
Además, los efectos de la sequía –que se prolongará hasta mediados de 2011– han afectado a la generación de energía eléctrica. Aunque las autoridades hayan alertado del riesgo, que puede desembocar en una crisis humanitaria, según Oxfam "las respuestas han llegado, por lo general, más tarde de lo necesario y se centran en medidas de emergencia como el transporte de agua y la compra de ganado débil o de bajo valor”.
El Índice de Desarrollo Humano sitúa a Uganda en el puesto 143 de 169, mientras que el 51,53% de la población vive en la pobreza, según el índice del PNUD. En torno al 35% de los ugandeses no tiene acceso al agua, un bien que aumenta su precio eventualmente y cuya calidad y salubridad no suele ser suficiente.
Mundo Negro
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