Abidjan (Agencia Fides) - “En la parte de Abobo, donde estamos, la situación es un poco más tranquila, aunque la zona está controlada por los hombres del llamado comando invisibles" dice a la Agencia Fides la hermana Rosaria, de la Congregación de la Sagrada Familia de Espoleto, hablando desde Abobo, la ciudad de Abidján, donde comenzaron los combates entre las fuerzas de seguridad que se mantienen leales al presidente en salida Laurent Gbagbo y los hombres del "comando invisible", un grupo cercano al presidente electo, Alassane Ouattara.
"En otras áreas de Abobo, la situación es más tensa - continúa la hermana Rosaria -. Por ejemplo, en Williamsville desde ayer, la población está encerrada en la casa y también la circulación del tráfico ha sido bloqueada”. Los rebeldes parecen haber hecho algunos progresos. El cuartel de la gendarmería Adjamé ha sido conquistada por la guerrilla. Los enfrentamientos se están moviendo a otras áreas de Abidjan, como el municipio de Yopougon.
"Nuestra situación es como la del resto de la población - explica la hermana Rosaria -. Estamos cerca de la gente, tratando de levantarles el ánimo, tal vez con alguna que otra broma. Nuestra presencia es ya una forma de ayuda, porque nuestra serenidad, aunque no siempre es fácil mantenerla, ayuda a la gente a soportar esta situación”.
Otra congregación de religiosas, las Hermanas de la Providencia, se ha visto obligada a abandonar su casa en Abobo, a causa de los ataques militares y de los enfrentamientos violentos que están sucediendo desde hace ya varios días. Las hermanas han perdido durante un saqueo a su misión dos vehículos y otros bienes.
(L.M.) (Agencia Fides 17/3/2011)
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