Con la celebración eucarística, la Comunidad de la Cripta de Catedral Metropolitana Monseñor Oscar Arnulfo Romero, y la Universidad Católica José Simeón Cañas (UCA), honraron la memoria de los mártires Jesuitas, en vísperas del aniversario del crimen, realizado por soldados el 16 de noviembre de 1989.
«Es como unir los dos recuerdos», dijo Jesús Sariego, Provincial de los Jesuitas en Centroamérica, que tuvo a cargo del acto litúrgico, junto a otros sacerdotes para celebrar los dones que dejaron a lo largo de sus vidas todos estos pastores de la grey católica.
Sariego recordó que Monseñor Arturo Rivera y Damas, al contemplar el asesinato de los seis sacerdotes y sus empleadas, en la sede de la UCA, había reiterado que los autores eran los mismos que cegaron la vida de Monseñor Romero.
«Nosotros los recordamos en nuestros corazones, con una gran satisfacción de haber sido compañeros y amigos de personas tan grandes que entregaron mucho por este país, y que su sacrificio no fue inútil, ya que la paz se logró, pero aun falta mucho por hacer, ese es el compromiso», dijo.
Sobre el pensamiento y principios que movieron a Monseñor Óscar Romero y los Jesuitas, Sariego agregó que la realidad del país ha evolucionado mucho desde esas fechas, pero los valores de justicia y solidaridad continuaban siendo un imperativo a cumplir.
«Lo más vigente de sus principios religiosos es que no puede haber un cambio para este país, sino se toman en cuenta a los pobres, su
futuro, sus alternativas, su situación, que fueron las grandes palabras de Monseñor Romero», reiteró.
Mientras, José María Tojeira habló sobre el incumplimiento de las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, sobre la investigación y aplicación de justicia a los autores intelectuales y materiales del asesinato de sus compañeros y empleadas de la UCA.
«Son recomendaciones vigentes, y cada año la CIDH, pregunta al gobierno de El Salvador, desde el expresidente (Francisco) Flores, si han cumplido con ellas, y todos los años estos gobiernos han dicho mentiras, diciendo que se ha cumplido una parte, avanzado en otras, pero la realidad las recomendaciones fundamentales no han dado ningún paso», aseveró.
La falta de una investigación profesional que se enmarque en estándares internacionales, para deducir la autoría intelectual del crimen colectivo de los miembros de la Compañía de Jesús, y el correspondiente juicio, ha quedado relegado, dijo Tojeira al evaluar el proceso de acatamiento de la sentencia.
«En compensación a las víctimas, es que se han dado algunos pasos, al darles a los Jesuitas un reconocimiento (póstumo), que es la máxima condecoración, José Matías Delgado, hace unos tres años, en materia moral; no obstante, aun la Fuerza Armada no ha pedido perdón por el crimen que según el Informe de la Comisión de la Verdad era evidente lo institucional», dijo.
«El pensamiento de ellos sigue vigente», reiteró Tojeira, al recordar la última conversación que sostuvo con Ignacio Ellacuría, antes de su muerte, y era el desafío que representaba el proceso de paz, en el país.
Diario CoLatino
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