Majella Anello: No elegiremos un “Papa de transición”

Entrevista con el cardenal brasileño sobre la situación de la Iglesia y los preparativos para el Cónclave

ANDRÉS BELTRAMO ÁLVAREZCIUDAD DEL VATICANO

A sus 79 años, Geraldo Majella Agnelo participará en su segundo Cónclave. Arzobispo emérito de San Salvador de Bahía, conoció a Joseph Ratzinger en El Vaticano durante su trabajo como secretario de la Congregación para el Culto Divino y la Discplina de los Sacramentos. Para él no existen grandes “papables” en la sucesión de Benedicto XVI. “Los candidatos están todos nivelados”, aseguró.

¿Cómo será la convivencia de dos Papas en El Vaticano?

Los primeros meses el Papa emérito estará en Castel Gandolfo, separado. Después él se trasladará dentro del territorio del Vaticano, pero no va a interferir en nada en el ejercicio del ministerio petrino del nuevo Papa. Él se ha colocado por debajo del pontífice que viene con una actitud de respeto y de obediencia, como si fuese un cardenal. Hizo ese gesto de sumisión no sólo para que conste sino porque realmente lo cree. Esto demuestra el misterio de la Iglesia, que no se puede simplemente explicar con nuestras categorías. El Papa no es alguien que está en el poder, sino alguien que está ante Dios, preocupado de llevar adelante su ministerio de vicario de Cristo.

Parece recurrente la idea del llamado “Papa de transición”, ¿cómo ve usted esa posibilidad?

Siempre que un Papa gobierna durante un periodo largo, entonces se piensa: mejor ahora que haya un “Papa de transición”. Muchas veces la realidad contradijo completamente esta supuesta transición. Nosotros no vamos a escoger un “Papa de transición”.

Y Benedicto XVI, ¿fue un “Papa de transición”?

Benedicto XVI no fue un “Papa de transición”. En su elección había, entre todos los cardenales, una persona con un mayor tiempo de ejercicio en una de las congregaciones más importantes del Vaticano como la Doctrina de la Fe. Eso hizo que él conociese bien a la Iglesia, su vida, sus dificultades y también las alegrías. Eso instintivamente los cardenales electores lo percibieron y por lo tanto la elección cayó sobre él. Ahora no tenemos alguno que sobresalga. Existen personajes de varios segmentos de la Iglesia en el mundo y que tienen características que llamen la atención. Están todos más o menos nivelados.

En estos días se escuchan diversas voces sobre cómo debería ser el próximo vicario de Cristo, “conservador” o “progresista”. ¿Usted qué opina? 

El Papa debe ser fiel al Evangelio. Él no puede decir: de ahora en adelante cambiamos lo que está en el evangelio de Jesucristo. Por ejemplo en materia de aborto, no se van a cambiar las cosas. Por más que el mundo entero hable, no ocurrirá. No pasará que se permitan nuevas uniones sacramentales después del divorcio. No se trata de conservadurismo. Nuestra posición son los mandamientos de la ley de Dios, con ellos damos una respuesta al mundo de hoy. Es importante que el Papa se haga presente para llamar la atención, sea de la Iglesia o entre los hombres de buena voluntad, para ofrecer una reflexión sobre diversos asuntos. Debe ser un pontífice que esté atento, para suscitar un debate en la propia humanidad.

¿Ya pensó a quién votar o un perfil genérico?

El Papa es el buen pastor. Las ovejas lo conocen y él conoce a sus ovejas. Por eso es importante que él sea un gran pastor para todos y también para hablar a los hombres de buena voluntad. Considero algunos pocos (cardenales) que sobresalen, de todas las regiones. Tengo más o menos cinco personas en mente. En el pasado he tenido muchos contactos con obispos por mi trabajo en El Vaticano, entonces conozco varios cardenales. Pero no estoy decidido. He pensado en algunos candidatos que me llaman la atención, algunas personas con cualidades para poder asumir la misión.

¿La procedencia geográfica tendrá algún peso?

Nadie va a presentar un candidato, no se procede de este modo. La procedencia geográfica pesará mínimamente. No se dice: ahora precisamos un Papa que venga de África o de Asia o de otra parte del mundo. Eso no ocurrirá. Tampoco se van a formar bloques por país, de cardenales que van votar por alguien en especial.

¿Qué espera del Cónclave?

En el primer escrutinio va a haber una dispersión muy grande de votos. Algunos van a aparecer con más sufragios, pero eso no quiere decir que sea el indicado. En la segunda votación veremos más claramente quien puede emerger con más consenso. Hasta que se llegue a los dos tercios de los votos, que permitirá identificar al elegido. Durante el Cónclave no tendremos contacto con el exterior. Por eso se llame así, Con-clave, quiere decir Con-llave. Estaremos encerrados ahí adentro y no tendremos contacto absolutamente ni con medios de comunicación, ni con teléfono o internet, nada de nada.

La Iglesia es un misterio, desde el punto de vista espiritual. No es un reino de este mundo, está en el mundo sin ser del mundo. Cristo Jesús es la cabeza de ese cuerpo que es la Iglesia. De manera que no se trata de una disputa de lugares sino de elegir a quien va a servir.

Vatican insider