Según una reciente investigación, casi un millón de fieles tendría la intención de abandonar las Iglesias católica y protestante
ALESSANDRO ALVIANIBERLÍN
En Alemania, un millón de fieles quiere abandonar las Iglesias católica y protestante. Si se suman los que están lo están considerando pero que todavía no han tomado una decisión definitiva, la cifra llega a más de 5,5 millones de personas. Es el resultado de un estudio que condujo el Instituto Sinus de Heidelberg (publicado en el suplemento “Christ und Wel” de la revista alemana “Die Zeit”).
En concreto, el 2,4 % del total de los católicos y protestantes mayores de 14 años declaró querer abandonar la propia Iglesia. El problema de la apostasía parece afectar en mayor medida a la Iglesia protestante: entre los protestantes la cifra de los que han decidido abandonar su Iglesia es del 3,2%, mientras que entre los católicos es de justamente la mitad (1,6%). El mismo resultado si se toman en cuenta los que están considerando la hipótesis de dejar su Iglesia: entre los protestantes son el 12,1% del total; entre los católicos, el 9,9%. «Para las iglesias cristianas Alemania se ha vuelto una tierra de misiones», escribe el director del Instituto Sinus, Bodo Flaig.
Los datos parecen confirmar, de hecho, el alejamiento progresivo de los fieles de las principales confesiones alemanas. Desde la reunificación de Alemania (1990) hasta 2008, la Iglesia protestante ha perdido el 17% de sus fieles; la católica, el 11%, indica Flaig. Al mismo tiempo, el número de los que pertenecen a otra confesión o que declaran no pertenecer a ninguna ha aumentado: se declaran, por ejemplo, sin confesión del 65 al 80% de los habitantes de los Länder orientales, es decir los que pertenecían a la Alemania de Este.
Según el estudio del Instituto Sinus (que fue llevado a cabo en octubre de 2011, con 2000 entrevistas individuales), más de la mitad (el 59%) se declara “persona religiosa”. El 33% dice sentirse relacionado con la propia Iglesia y el 28% participa activamente en la vida eclesiástica, como, por ejemplo, voluntario. El 21% va regularmente a misa y el 10% reza todos los días. Además, el 40% está convencido de que es importante ofrecer una educación religiosa a los niños, mientras que el 23% sostiene que se interesa “mucho” o “bastante” por las cuestiones religiosas.
A partir de este análisis socio-económico del instituto surge una cierta distancia de la Iglesia oficial incluso entre los alemanes más cercanos a las confesiones cristianas. En ninguno de los diferentes “milieu” (subgrupos socioeconómicos) en los que Sinus clasifica a la sociedad alemana, la Iglesia logra alcanzar una mayoría concreta en número de seguidores.
Vatican Insider
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