Patricio Downes/RD).- La Conferencia Episcopal Boliviana condenó "vehementemente" el atentado con explosivos que en la madrugada del jueves sufrió la vivienda donde el prefecto de Potosí, Mario Virreira, en el sur de Bolivia, dormía con su familia.
"La Iglesia Católica rechaza la violencia, venga de donde venga, por considerarla intrínsecamente perversa y porque debilita las bases democráticas de nuestra sociedad", señaló el Episcopado del país, en referencia al ataque contra Virreira, aliado del presidente Evo Morales.
POr su parte, el actual alcalde y candidato a la presidencia por Alianza Social (AS), René Joaquino, opositor al MAS de Morales, rechazó su presunta vinculación con el atentado denunciada por el líder campesino, Juan Canaza, también aliado al presidente.
En abril pasado, mientras se recuperaba de una cirugía de corazón en su casa de descanso en Masicurí, Vallegrande, la residencia del arzobispo de Santa Cruz, Cardenal Julio Terrazas, también sufrió un atentado. Terrezas declaró entonces a a la red PAT: "Miedo no tengo. Decir que no voy a hablar más, eso sería traicionar mi misión, que va más allá de mi propia vida".
En su comunicado, este viernes, la CEB recordó que "la Doctrina Social de la Iglesia Católica afirma que la 'violencia jamás constituye una respuesta justa... La violencia destruye lo que pretende defender: la dignidad, la vida, la libertad del ser humano' (DSI 496)".
Al final, hizo llegar "su voz de solidaridad al prefecto potosino y a su familia. A las autoridades del ministerio público les anima a extremar sus esfuerzos para esclarecer este hecho, a fin de que los responsables sean sancionados y, sobre todo, para que este tipo de actos no queden en la impunidad y el olvido".
En los últimos meses se han registrado varias explosiones en la ciudad de Potosí, gobernda por un opositor al presidente Morales, pese a que el distrito está en manos del oficialismo. La prensa local enumeró los ataques contra radio San Antonio, el canal de televisión de propiedad de los mineros, varios domicilios e incluso la voladura de una imagen religiosa en el templo San Francisco.
En los atentados se utilizaron principlamente cartuchos de dinamita.El departamento de Potosí es minero por lo que cualquier persona puede comprar dinamitas y fulminantes. Y Virreira ya ha sufrido otros atentados antes, luego de obtener, en el referendo revocatorio de prefectos en 2008, el 79,08 % de apoyo a su gestión; siendo así uno de los prefectos con mayor porcentaje de aprobación en Bolivia.
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