PARA PENSAR. Reflexiones de actualidad: Indignación activa.

Graffiti en el muro de la vergüenza en Cisjordania

El sacrificio es una virtud que siempre nos parece admirable… en los demás (Enrique Jardiel Poncela).

Está de moda indignarse. Por la radio, la tele, en los telediarios no faltan miles de personas indignadas que nos explican otras tantas razones para estarlo nosotros. Y cierto es que motivos nos sobran: el paro, las guerras en África, los disturbios en Asia, el hambre en medio mundo, el conflicto de oriente medio, las subidas de impuestos… pero no es menos cierto que la indignación pasiva es una opción tan cómoda como estéril.

Sin embargo, muchas veces la opción activa requiere sacrificios que no estamos dispuestos a realizar. ¿Me indigna tanto el hambre como para luchar contra él dando parte de mi dinero y mi bienestar? ¿Me preocupa tanto el conflicto palestino como para protestar contra él visiblemente? La mayoría de las veces simplemente nos dedicamos, en medio de nuestra inconsolable y ruidosa indignación, a aplaudir que realicen estos sacrificios otra gente. Gente muy loable, eso sí…

Charles Evans

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