2 de Noviembre, 2011. (Romereports.com) Benedicto XVI rezó el ángelus en la Plaza de San Pedro el Día de todos los Santos, y lo dedicó a la santidad. El Papa dijo que la santidad es el encuentro con el Amor de Dios.
Benedicto XVI
“En la solemnidad de Todos los Santos, la Liturgia nos invita a contemplar el amor infinito de Dios, que se refleja en la victoria de los que ya gozan de su gloria en el cielo”.
Benedicto XVI explicó que los santos son un modelo de vida para todos los cristianos, pero cada uno de manera personal.
Benedicto XVI
“Hoy veneramos a esta innumerable comunidad de todos los Santos, que a través de sus diferentes estilos de vida, nos muestran diferentes formas de santidad, unidas por un común denominador: seguir a Cristo y adherirse a Él, como objetivo final de nuestras vidas”.
Haciendo referencia al Día de los difuntos, Benedicto XVI explicó que la muerte es la unión del hombre con Dios.
El Papa recordó la importancia de visitar a los familiares difuntos en el cementerio. Destacó la importancia de rezar por ellos porque mantiene viva su memoria y recuerda que hay una vida después de la muerte.
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