¿Dónde puedo ver y reconocer la Presencia de Dios? ¿Dónde puedo ver la impresión de su Mano? Dios está presente en el Pabellón del Cáncer, donde yo trabajo. Los pacientes llegan para recibir sus tratamientos, cansados y aprehensivos. Son vulnerables recientes, y las experiencias adquiridas en sus profesiones están ausentes por el momento. Sin embargo, sus ojos están llenos de esperanza por el comienzo de su curación. Éste es un lugar diferente a todos los que han conocido. Con la ayuda de profesionales que los reciben y atienden con cariño, aprenden a relajarse en la presencia de los demás pacientes. Se sacan sus pelucas, bisoñés y joyas, y muestran sus pobres cuerpos heridos. Por el tiempo que permanecen ahí, se permiten ser tal como son.
Mientras la medicina actúa en sus cuerpos, las sensaciones de confianza, esperanza y amor se perciben alrededor. Sólo está presente la pura y simple dependencia - en Dios, en la ciencia, en el cariño amoroso de los demás. Las trampas del mundo comercial no ayudan cuando estamos totalmente vulnerables. No necesitamos vestir nuestra pobreza como se usa en el mundo. Podemos confiar, sencillamente confiar que en el Pabellón del Cáncer estamos en la casa de Nuestro Señor. Ahí somos acogidos tal como somos. Ahí estamos en manos de buenas personas, escoltas de sanación y Gracia, a quienes Dios ha enviado para que nos acompañen. Está perfectamente bien ser pobre.
Espacio Sagrado
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