¿Contrataron realmente los curas colombianos a los sicarios que los asesinaron?

Persisten las dudas sobre la versión de la Fiscalía

Reátiga y Piffano fallecieron el 14 de febrero

(Semana Católica).- El pasado martes 14 de febrero, Colombia y el mundo amanecieron bombardeados por parte de los medios de comunicación con los resultados de la investigación de la Fiscalia acerca delcrimen cometido contra los sacerdotes Rafael Reátiga y Richard Píffano por unos sicarios, que presuntamente fueron contratados por ellos mismos para tal fin.

Sin embargo, existen grandes dudas sobre la veracidad de la Investigación, que conmocionó a todo el país: un hecho sin antecedentes, como lo dice la Revista SEMANA de Colombia.

La confianza que la mayoría de los fieles católicos depositan en sus sacerdotes es total, por lo tanto, resulta desesperanzador y desilusionante que historias como las de los Padres Reátiga y Píffano salgan a la luz pública.

La historia que presenta la Fiscalia de Colombia parece -absolutamente- creíble. Sin embargo, algunas personas aseguran que los sacerdotes no habrían hecho lo que supuestamente hicieron.

La mayoría de los medios de comunicación de dicho país no mencionan demasiado la frecuente lucha que el Padre Reátiga mantenía contra los Falsos Positivos llevados a cabo por parte del Ejército Colombiano, asesinando jóvenes para presentarlos como miembros de la guerrilla de las FARC. El Sacerdote ya había sido amenazado por este motivo, además, era el ecónomo de su Diócesis y podría haber cierto interés en él por los supuestos montos de dinero que podría manejar.

Resulta curioso, además, que sea del sacerdote Reátiga, quien denunciaba estos actos, del cual se hable la peor parte de la historia: tenía SIDA y sífilis, buscó sus propios asesinos y dejó todo organizado. Del Padre Píffano no se cuenta casi nada, pareciera que el Padre Reátiga hubiese obligado a estar con él en el carro. También se dice quepactaron esa muerte porque eran amigos, pero resulta difícil creer estos hechos viniendo de un Sacerdotes, defensores de la vida.

¿Por qué estaba abierta la cuenta en facebook del Padre Reátiga dos horas después de su asesinato, como lo afirman algunos de sus amigos en la red social? ¿Por qué fueron algunas personas a la Casa Cural luego de sus asesinatos? ¿Qué buscaron, qué se llevaron, qué dejaron, qué pruebas cambiaron?

Muchas preguntas quedan a raíz de esta investigación y, desafortunadamente, los protagonistas ya no se encuentran. De modo que todo lo que puedan decir testigos o sicarios, puede ser tenido en duda, porque de un muerto se puede decir lo que quiera.Será Dios quien limpie la imagen de estos Sacerdotes, de sus familias y de la Iglesia.

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